Huertos de los ch’olti, 2020

Installation view: How to Tread Lightly. st_age expanded, an exhibition, Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid, Spain, 2020

Photo: Roberto Ruiz | TBA21
Installation view: How to Tread Lightly. st_age expanded, an exhibition, Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid, Spain, 2020

Photo: Roberto Ruiz | TBA21
Installation view: How to Tread Lightly. st_age expanded, an exhibition, Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid, Spain, 2020

Photo: Roberto Ruiz | TBA21
TBA21 on st_age
Collection
Digital

ES/EN

Instalación con tres cortinas de cuentas (bronce, cuentas de cerámica, resina, vidrio, cabello artificial, tejido)
240 x 120 x 45 cm
Un encargo producido por TBA21 Thyssen-Bornemisza Art Contemporary para la exposición «Avanzar con paso leve» en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, del 5 de octubre de 2020 al 17 de enero de 2021, comisariada por Soledad Gutiérrez

Huertos de los ch’olti, 2021
Acuarelas y lápiz sobre papel
Dimensiones variables

La obra de Naufus Ramírez-Figueroa abarca performance, vídeo, escultura, instalación e impresión, y da cabida a indagaciones en torno a los sueños, la arquitectura, el teatro y lo espiritual. Ramírez-Figueroa suele investigar relatos históricos –especialmente las huellas de la brutal guerra civil que tuvo lugar en Guatemala entre 1960 y 1996– a través de las condiciones del cuerpo.
 
Tomando como inspiración los jardines «encantados» del antiguo territorio de lengua ch’olti, hoy en Belice y Guatemala, Huertos de los ch’olti consta de una serie de cortinas de cuentas, cada una de ellas colgada de una rama de bronce adornada con frutos de cacao, vainilla y achiote. Estos tres cultivos ocuparon un papel central en un complejo sistema agroeconómico prehispánico ligado a los manche ch’ol de las tierras bajas mayas hasta finales del siglo XVII. En 1695, bajo dominación española, el fraile Francisco Morán registró la lengua ch’olti en un manuscrito titulado Arte y vocabulario de la lengua Cholti. Es el único testimonio de la lengua ch’olti antes de su extinción. Tras años de pacificación fallida y siguiendo los consejos de Morán, los hablantes de ch’olti fueron violentamente expulsados y aniquilados, y sus tierras quedaron despobladas bajo autoridad militar y misionera. Durante las décadas siguientes el territorio ch’olti fue un lugar encantado y maldito para los colonialistas. Se dice que los españoles del siglo XVIII observaron que los campos de cacao, vainilla y achiote seguían cultivándose, aunque nadie en la zona cuidara de las cosechas. El manuscrito de Morán, y el contexto en que fue creado refleja la larga historia de imperialismo religioso y evangelización en América Latina, los procesos de deculturización y las pérdidas que el pueblo guatemalteco sigue sufriendo en la actualidad.
 
Una serie de dibujos preparatorios para la instalación sirven como vehículo para un imaginario fragmentado, que da forma al pueblo perdido de los manche ch’ol. Trazados con finas líneas y lápices de colores sobre papel, los dibujos reconstruyen los personajes tallados en los amuletos de resina y vidrio que integran la instalación. En deuda con la lengua de las cosmologías indígenas y con la ciencia ficción, los dibujos retratan lo que parecen ser fantasmas, espíritus y seres terrenales: rostros y cuerpos con rasgos humanos que se transforman en plantas, bulbos, flores y hojas. Las partes con formas botánicas brotan de las bocas, las orejas, los ojos y los dedos de figuras legendarias a cuya historia de expulsión y supresión rinde homenaje Ramírez-Figueroa. En algunos de los dibujos, el artista inserta cabezas zoomórficas, formas que recuerdan a fetos y crisálidas, en una simbología vinculada a la suspensión, la metamorfosis y lo liminal. Dibujados sobre papel blanco o, en algunos casos, en un fondo nuboso pintado con acuarela, estas figuras viven en transición entre dos mundos. En la obra de Ramírez-Figueroa, fantasmas personales y colectivos pueblan mundos surreales.
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Nacido en Ciudad de Guatemala, Guatemala, en 1978. Vive en Ciudad de Guatemala.